Nace de la inquietud de Juanfra Valiente (jefe de creatividad del restaurante) y Quique Dacosta de crear una bebida que armonizara con platos de ingredientes complejos. Una cerveza que fuera un universo en sí misma a nivel gustativo y organoléptico. Compleja en matices, con ingredientes y procesos artesanales.
Todo empezó, con la observación, la prueba y el error; lo que dio paso a la receta original, que fue cocinada por primera vez en las cocinas de este restaurante tres estrellas Michelin. Una bebida claramente gastronómica. Se abrieron a continuación otras posibilidades y creamos la receta de La Fallera y La Beata.
Dos años pasan desde que se crean las recetas originales hasta que se encuentra la tecnología y el expertise para que LA VALIENTE como marca, y sus tres cervezas La Fallera, La Valiente y La Beata, pudiera llegar a más gente. Era hora de que la receta original fuera cocinada en instalaciones con la infraestructura específica, profesional y controlada. Tecnología que está en nuestra misma línea: partiendo de una base tradicional, se evoluciona, parametriza y al final se encuentra la perfección.
Una vez testada en nuestros restaurantes, damos un paso más y salimos al mercado, buscando que una parte de nuestro ADN llegue en forma líquida a los hogares y otros restaurantes.
Tres cervezas distintas, de aguja fina y relajada, para diferentes momentos del día. Hemos introducido en cada una de ellas ingredientes y aromas, inspirándonos en productos que se han convertido en fetiche en nuestra cocina: arroz, regaliz, jengibre, azúcar moscobado, arrope…
Además de nuestro equipo de creatividad en cocina, hemos tenido la inmensa fortuna de contar con la maravillosa participación de Paula Bonet (https://paulabonet.com/) quien ha dado forma a estas tres mujeres. Ella les dio vida con sus trazos, a partir de los sabores, los olores, los matices; desde una historia contada a través de platos y el líquido que los armoniza. Sus manos son responsables de la personalidad y fuerza de la valiente, la fallera y la beata.